Cuando Juan se despertó una mañana después de un sueño intranquilo -llamémosle Juan por no llamarle Gregorio Samsa-, no se encontró sobre su cama convertido en un monstruoso insecto, no, pero algo extraordinario le sucedió al ponerse sus gafas de nadar intensamente azules y empezar a ver el mundo con otro color.
Juan es Juan Mayorga y el inconsciente ese que se le aparece en el escenario es César Sarachu. Como uno solo formulan la raíz cuadrada de menos uno mismo y calculan, en un brillante ejercicio de teatrosofía intensamente audaz, mi propia inconsistencia de número imaginario. La metamorfosis está completa: los tres, Juan, César y yo mismo, somos ya un único sujeto a la deriva.
Últimas noticias
“Vulva” de Irene Herrero en la Sala Mirador
Vulva es una cuenta atrás, una cuenta atrás en la semana más ajetreada del calendario escolar: la semana de Carnaval. Todo el colegio se prepara para la Gran Gala de Carnaval y este año el tema son:...
«La lengua en pedazos», de Juan Mayorga: Teresa de Jesús y la mística como subversión
"Un coraje singular el de esta Compañía que trabajó duro online, antes de reencontrarse para ensayar una obra con cambios considerables por parte del autor-director y su protagonista. Así, Juan...
Ana Barceló y Víctor Barahona seleccionados para las residencias artísticas de ayudantes de dirección de escena del Teatro Español
El Teatro Español y las Naves del Español en Matadero convocaron el pasado 28 de octubre de 2020 el I Programa de residencias artísticas de ayudantes de dirección de escena, cuyo plazo expiró el 12...